- LAO TSE -
TAO TE KING
Lao Tse (570-c. 490 a.C.), filósofo chino considerado el fundador del taoísmo. La confusión en torno a su
fecha de nacimiento radica en la leyenda según la cual instruyó a Confucio; en realidad, si Lao-tsé existió
fue en la persona de un filósofo anónimo del siglo IV a.C. que atribuyó su trabajo a este sabio legendario.
Según la leyenda, Lao-tsé nació en la provincia de Henan y fue un bibliotecario de la corte. Se supone que
dejó escrito el Tao Te-King (o Daodejing, Libro de la Vía y de la Virtud), el gran tratado filosófico chino,
cuando abandonó China para irse a vivir a un lugar desconocido de Occidente. Con mucho, el Tao Te-King
es la obra literaria más traducida del chino y tuvo una enorme influencia en el pensamiento y la cultura
orientales. Este libro, que cuenta con tan sólo 10.000 caracteres, fue redactado hacia el año 300 a.C. y
parece ser una antología que recoge antiguas enseñanzas, aunque la densidad de su estilo sugiere que es
obra de un único autor. La mayor parte del libro está compuesta por rimas y puede ser leído como un largo
poema filosófico. Enseña que "el camino" (dao) del mundo se realiza con mayor aprovechamiento
abandonando las categorías y los valores en favor de la percepción espontánea. El sabio busca "no hacer
nada" (wu wei) y deja que las cosas sigan su curso natural; así, como estaba destinado a un monarca, al rey
que pretenda ser inteligente y apto se le recomienda que mantenga a su pueblo en la sencillez y la pasividad
para que así pueda amoldarse a la naturaleza, auténtica meta del hombre. Relatos y mitos posteriores
integraron a Lao-tsé en la religión china, convirtiéndole en una deidad principal de la religión taoísta que
revelaba los textos sagrados a la humanidad; algunas leyendas sostienen que tras salir de China se convirtió
en Buda.
Este libro consta de 81 capítulos de los que aquí se exponen 37. Espero que le guste y disfrute con su
lectura.
I
El Tao que puede ser expresado
no es el verdadero Tao.
El nombre que se le puede dar
no es su verdadero nombre.
Sin nombre es el principio del universo;
y con nombre, es la madre de todas las cosas.
Desde el no-ser comprendemos su esencia;
y desde el ser, sólo vemos su apariencia.
Ambas cosas, ser y no-ser, tienen el mismo
origen, aunque distinto nombre.
Su identidad es el misterio.